La muchacha...

de la leona.

No será la del arete de perla, pero a mi me gusta muchísimo esta foto.
Es música, la he visto bailar y la he escuchado cantar, supongo que al he escuchado tocar pero no recuerdo. Esa noche todos llevabamos demasiado tiempo sin dormir (Dos noches anteriores de fandango hacen estrago en cualquiera). Ella iba envuelta en su rebozo con su leona a la espalda, cruzada de brazos, traía en la cara el mismo cansancio que yo, pero con mucha más gracia. Le pedí permiso para tomarle una foto, lo cual siempre es un pretexto barato para charlar. Le tomé dos fotos; esta, que es la que yo queria desde un principio, y otra de frente que salió paraleada, me quedé con medio rostro y media sonrisa de Paulina, que tengo que completar con la memoria cada vez que veo la foto fallida, ayer la saqué, con todo e imagen, del olvido.

salú